Importancia en la práctica del fact checking para la sociedad peruana y el periodismo de hoy, partiendo de la controversia generada por la muerte en prisión de Abimael Guzman

 

Es evidente que el fact cheking es de suma relevancia, ya que gracias a su empleo se logra difundir información que es previamente examinada pormenorizadamente y en resultado veraz. Esta comprobación de hechos parte desde el discurso público hasta la verificación de las fakes news. 

Pero, ¿Qué hacen los fact checkers? Ellos son los designados a juzgar la credibilidad de un contenido antes de que este se de ha conocer o de ser ya pública, confirmar si es real o no.

(Cientefic American, 2020)

¿Dónde radica la importancia del fact checking para la sociedad y periodismo en Perú, tras la controversia por la muerte de Abimael Guzmán?

Según la periodista de Ojo Público, Gianella Tapullima el fact checking es un ejercicio de argumentación ya sea para desmentir o explicar lo que está pasando. (MEDIA LAB, 2021)

Esta verificación empleada en el periodismo tiene la misión de combatir la desinformación que abunda tanto en redes como en muchos casos hasta en los medios masivos y que puede ser muy nocivo.
En el caso peruano es muy común que las personas al saturarse de información caigan en la desinformación y hay cantidad de escenarios que lo prueban. En ese sentido, uno que refleja como puede distorsionarse una noticia si no se aplica el fact checking es el reciente fallecimiento del líder terrorista Abimael Guzmán, puesto que se está conspirando acerca de la veracidad de su deceso.  Lo controversial es que no es sólo producto del "bóks-pópuli", si no  que también la congresista de fuerza popular Marta Moyano, ha manifestado tras recibir dicha noticia en una entrevista a canal N: "Hoy un día antes de celebrar la captura del terrorista se anuncia que murió tres horas después: ¿han visto su cadáver? ¿Sabemos en qué lugar murió? Esas interrogantes se cruzan a varios ciudadanos", que claramente se presta a suspicacias.

Otro caso controversial, fue el que se dió el año pasado cuando en medio de la pandemia se propago una noticia falsa que indicaba que el dióxido de cloro curaba el COVID, lo cual no tiene ninguna prueba científica y por ello es que el MINSA tuvo que invocar a la población a no consumirla puesto que más bien puede representar un peligro para quienes lo consuman.

Otro ejemplo también que causó revuelo es el dato totalmente desacertado que se dió a conocer en el programa Rey con Barba donde aseveraban que la policía había confiscado armas a los manifestantes de la marcha contra Merino cuando en realidad la imagen que acompañaba la  noticia correspondía a una difundida en Chile tiempo atrás. 

(RLN, 2019)

En realidad son innumerables los casos de desinformación que comprueban la crisis que promueve la misma y que si no hay un filtro eso no acabará nunca y por ello es que hasta el ex mandatario Francisco Sagasti manifestó que nuestro país atraviesa una pandemia de desinformación.

Podemos concluir que claramente hay una gran necesidad de un periodismo en el que se emplee el fack checking porque al la población peruana tener acceso a una información 100% confiable es seguro que por el impacto que tiene en la toma de decisiones habrán cambios positivos como resultado.